segunda-feira, 28 de novembro de 2016

Mídia Sem Máscara - Sinopse criminal de Fidel Castro

Mídia Sem Máscara - Sinopse criminal de Fidel Castro

El Telón de la Caña de Azúcar: así colonizó Fidel el Tercer Mundo

Si el Este tuvo un Telón de Acero, y China extendió por Asia su Telón de Bambú, en Iberoamérica y otros lugares de Asia y Africa fue Castro quien levantó un Telón de "imperialismo“ rojo, mediante el crimen y la guerrilla.




Los Castro y sus camaradas justificaron su revolución para oponerse al “imperialismo” de Estados Unidos en Iberoamérica. En poco tiempo, cayeron en el vicio que reprochaban a Washington. La Habana se convirtió, en colaboración con Moscú, en exportadora de la revolución y adiestradora de terroristas.
La revolución es como andar en bicicleta: si dejas de pedalear, te caes. Con esta idea, los ‘barbudos’ que irrumpieron en La Habana en enero de 1959 convirtieron Cuba en un foco de injerencia militar y política en el resto del hemisferio occidental.
Sólo un mes después de tomar el poder, en febrero de 1959, Castro acudió a Caracas a la toma de posesión del socialdemócrata Rómulo Betancourt, que sucedía al dictador general Marcos Pérez Jiménez, y le exigió que Venezuela regalase petróleo a Cuba, a lo que el civil se negó.  

La revolución es como andar en bicicleta: si dejas de pedalear, te caes
La respuesta castrista consistió en amparar a los guerrilleros de izquierdas venezolanos. Por parte del Gobierno democrático, combatió a esos terroristas desde el Ministerio de Relaciones Interiores Carlos Andrés Pérez, quien luego, como presidente del país (1974-1979) y vicepresidente de la Internacional Socialista (1976-1992), fue uno de los defensores del castrismo en Occidente.
Uno de los actos de injerencia castristas (‘solidaridad internacionalista’, según la lengua de trapo comunista) más conocidos fue la participación del argentino Che Guevara en la guerrilla bolivia entre 1966 y 1967.
En 1963, Fidel envió a Jorge Masetti a Argentina para levantar una guerrilla, proyecto que fracasó. El hijo de éste fue criado en Cuba y convertido en ‘soldado de la revolución’, hasta que la abandonó.
También en 1963, los cubanos pisaron África: participaron a petición del Gobierno socialista argelino (FLN) en la guerra contra Marruecos; al año siguiente, intervinieron en la guerra del Congo belga.

En la primera mitad de 1959 se habían producido los intentos de invasión a Panamá, Nicaragua y República Dominicana con respaldo cubano

En agosto de 1959, se celebró en Santiago de Chile la V Reunión de Consulta de los Ministros de Relaciones Exteriores de los países miembros de la OEA , solicitada por los Gobiernos de Brasil, Chile, Estados Unidos y Perú. La Declaración de Santiago fue una defensa de la democracia liberal contra los revolucionarios.
Los castristas se lo tomaron como un ataque y Fidel Castro respondió con la Declaración de Santiago de Cuba, de 26 de julio de 1964, en la que afirmaba: “los países que se inmiscuyen en los asuntos internos de Cuba y promueven la contrarrevolución no tienen ningún derecho a quejarse de que nosotros ayudemos a la revolución de esos países”.

Che Guevara en la selva en Bolivia
 
Uno de los actos de injerencia castristas (‘solidaridad internacionalista’, según la lengua de trapo comunista) más conocidos fue la participación del argentino Che Guevara en la guerrilla bolivia entre 1966 y 1967.
En 1963, Fidel envió a Jorge Masetti a Argentina para levantar una guerrilla, proyecto que fracasó. El hijo de éste fue criado en Cuba y convertido en ‘soldado de la revolución’, hasta que la abandonó.
También en 1963, los cubanos pisaron África: participaron a petición del Gobierno socialista argelino (FLN) en la guerra contra Marruecos; al año siguiente, intervinieron en la guerra del Congo belga.

Con el mismo fusil AK-47 que le regaló Fidel en 1971, el presidente chileno Salvador Allense se suicidó dos años después, durante el golpe de Estado

Por invitación del socialista chileno Salvador Allende, Castro recorrió el país durante tres semanas en noviembre de 1971, dando consejos y animando a hacer la revolución. Entre los regalos que dejó, destaca un AK-47 que entregó a Allende con la siguiente inscripción en la culata: “A Salvador, de su compañero de armas Fidel”.
¿Algún presidente de Estados Unidos ha girado una visita oficial de semejante duración a otro país americano y dejado semejante regalo? Con ese mismo fusil, Allende se suicidó en septiembre de 1973, durante el golpe de Estado militar.
Allende montó una escolta personal que sustituyó a los militares y carabineros que guardaban al presidente. Se llamó Grupo de Amigos Personales (GAP) y se entrenaban en el manejo de armas. Entre ellos, como asesores al estilo de la CIA, figuraban los gemelos cubanos De la Guardia, juzgados en 1989 por la dictadura castrista por narcotráfico.
Cuando estalló la guerra del Yom Kippur (1973), el presidente sirio Hafez el Assad pidió asistencia militar a Fidel Castro, que mandó una brigada de blindados que se enfrentó a unidades israelíes.

El presidente de etiopía Mengistu Haile Mariam.
 En 1974, el dictador etíope Mengistu -célebre por la hambruna que causó a su pueblo a mediados de los años 80- también solicitó tropas a La Habana, que respondió con gusto.

Durante 15 años el régimen castrista envió a Angola unos 300.000 militares, episodio de solidaridad internacionalista, alabado por Gabriel García Márquez
Al producirse en 1974 el golpe de Estado de izquierdas en Portugal, que derrocó la dictadura de derechas, Lisboa abandonó su imperio colonial, que hasta entonces había defendido contra los rebeldes.
En noviembre de 1975, los Castro enviaron las primeras tropas a Angola, para ayudar al régimen socialista en la guerra civil.
A lo largo de 15 años, pasaron por Angola unos 300.000 militares. Este episodio de ‘solidaridad internacionalista’, que contribuyó a alargar la guerra, fue alabado por Gabriel García Márquez.
Semejantes traslados de personal y de equipamientos no habría sido posible sin la colaboración de la Unión Soviétia. El economista Alberto Recarte ha calculado que los subsidios soviéticos supusieron entre 1970 y 1990 en torno al 30% del PIB anual cubano.
 Los cubanos también se unieron a los sandinistas en la guerra contra los Somoza en Nicaragua. La primera victoria obtenida por los castristas desde la conquista del poder en Cuba. En palabras de Jorge Masetti: “En Nicaragua se reivindicó una generación derrotada”.
En 1975, dentro del Partido Comunista Cubano se instauró el Departamento América, dirigido por el guerrillero Manuel Piñeiro (a) Barbarroja, con el objetivo de fomentar las revoluciones y los grupos terroristas en Iberoamérica.
Piñeiro falleció en 1998 en accidente de coche y el departamento se disolvió en 2010, pero antes instruyó y organizó a guerrillas de todo el continente.

Cuba también acogió a varios etarras, en ocasiones a petición del Gobierno socialista de Felipe González.

Fidel Castro y Felipe Gonzalez
 En la necrológica que de él escribió un periodista español aparecía lo siguiente: “guardián implacable de la revolución y defensor a ultranza de las causas guerrilleras en el continente”. Cuba también acogió a varios etarras, en ocasiones a petición del Gobierno socialista de Felipe González.
Los servicios secretos cubanos, que han adiestrado, protegido y armado a los numerosos grupos guerrilleros de Iberoamérica, instaron a éstos a que se financiasen mediante robos de bancos y secuestros. “Sin plata no se hace la revolución”, decía Piñeiro.
Algunos de esos camaradas, como los ‘miristas’ chilenos, se especializaron en colaborar en secuestros con otros guerrilleros y delincuentes comunes y un grupo de ellos llegó a España, donde trabajó para ETA.
En un discurso pronunciado en La Habana el 24 de julio de 1994 Fidel se mostró orgulloso de haber empleado a su pueblo como carne de cañón: “bien saben ustedes que les está hablando alguien que participó en la lucha armada y que apoyó al movimiento revolucionario armado, de lo cual no nos arrepentimos”.

Y tras la Caída del Muro: el castrismo alimentó la dictadura en la Venezuela de Chávez y Maduro y la Bolivia de Morales

A pesar del derrumbe de la Unión Soviética y de la pérdida de ayuda económica, la dictadura castrista no canceló sus programas de subversión; sólo los modificó y adaptó a los nuevos tiempos. Cuando Hugo Chávez accedió al poder en Venezuela en 1998 comenzó otra época dorada para el imperialismo cubano.
Los médicos, ingenieros y asesores cubanos volvieron a países de donde habían salido con el rabo entre las piernas y esta vez por la puerta grande.
En la Venezuela de Chávez y Maduro y la Bolivia de Morales, los servicios de seguridad locales no sólo crecieron, sino que parte de ellos los dirigen cubanos. Los asesores enviados por La Habana se encuentran también en la guardia de palacio y hasta la cabina del avión presidencia.
En Cuba se pasa hambre, pero siempre hay plata para el ejército y los servicios secretos.

http://www.actuall.com/criterio/democracia/telon-la-cana-azucar-asi-colonizo-fidel-tercer-mundo/

sábado, 26 de novembro de 2016

La Cuba que yo conocí como periodista clandestino, por Luis Losada

“Como si el reloj se hubiera detenido en 1959” cuenta el autor, que en 2006 se hizo pasar por turista para entrar en Cuba. Aún gobernaba Fidel antes de pasar el testigo a su hermano Raúl. Losada relata ahora para Actuall las impresiones de aquella aventura.



Pobreza infantil en Cuba    

Verano del 2006. La Habana. Dos periodistas aterrizamos en la Habana con pasaporte de turista. ¿Nuestro objetivo? Patear la realidad para poder contarla. ¿Qué vimos? Una sociedad arrasada por el comunismo caribeño.
Como si el reloj se hubiera detenido el 1 de enero de 1959. Edificios señoriales en ruinas, suciedad en las calles, montañas de ociosidad y mucha desconfianza del vecino.
En Cuba todo era y es un estado policial. Un policía de uniforme cada 100 metros y otro de incógnito entre medias. En cada manzana un Comité de Defensa de la Revolución, los chivatos del barrio que informan quien entra, quien sale, con quién lo hace y qué es lo que hace. Y por si fuera poco, los informantes.
Todos los empleados de hoteles, restaurantes y taxis son colaboradores. Imposible dar un paso sin que el sistema se entere.
Tomamos todo tipo de precauciones para evitar ser deportados (…) pedíamos al taxi que nos dejara dos manzanas antes o después de nuestro destino.
Tomamos todo tipo de precauciones para evitar ser deportados. Vestimos como turistas, pedíamos al taxi que nos dejara dos manzanas antes o después de nuestro destino, y evitábamos conversaciones en público.
A los pocos días uno de los ociosos de la calle nos espeta: “Vosotros sois periodistas, ¿no?”
Y es que -como nos dijo el disidente Oswaldo Payá- el sistema comunista “no sólo es corrupto sino corruptor”. No sólo ha esquilmado de recursos al pueblo sino que le inoculado la desconfianza hacia el vecino.
Muerta la sociedad, sólo queda el Estado. Un Estado ineficiente incapaz de satisfacer las necesidades básicas de sus ciudadanos: dos huevos y una bolsa de leche al mes y una pastilla de jabón y pasta de dientes cada dos meses. ¿Y luego? Que cada uno se ‘invente’ la existencia.


Coches en Cuba  

Puede que el régimen funcionara en sus primeros años con la respiración artificial soviética. Pero tras la caída del Muro de Berlín, el sistema se derrumbó y optó por permanecer en la mentira.
En Cuba hay coches de los años 50 del siglo pasado no porque sean conservacionistas sino porque no hay para más.
“Se arreglan lavadoras rusas”, decía un cartel. Las lavadoras que había eran las que eran. Y había que sobrevivir con ellas…. Así es como un cubano se ‘inventaba’ la existencia.
En el Museo de la Revolución, propaganda castrista, o sea burda y cutre: que si EEUU es la encarnación del mal, que si somos pobres es por culpa del embargo, que somos igual de pobres que Nicaragua u Honduras, pero sin desigualdad y más dignos.
¿Si EEUU es tan mala porque los cubanos se juegan la vida para arribar a sus costas?, ¿si el sistema castrista es tan justo, por qué hay ejércitos de indigentes y prostitutas?,
¿Por qué los niños corren descalzos con la tripa hinchada por el hambre?, ¿por qué los jóvenes me ofrecían 10.000 dólares por un contrato de trabajo ficticio para poder escapar?
Practicar comunismo soviético en el indolente Caribe sería imposible si Cuba no fuera una isla y por tanto una cárcel gigante donde la mitad de la población vigila a la otra mitad. En Cuba todo está prohibido, pero todo se hace.
Está prohibido internet, pero todos se acercan a los cibercafés y les piden a los turistas un pase.

  
Pobreza en Cuba  
Está prohibida la prostitución, pero las mujeres llevan a sus hijas a los hoteles de lujo para ‘inventarse’ la existencia…
Está prohibida la televisión por cable pero muchos tienen una. Eso sí, con el cable a mano por si alguien grita “agua” y hay que desenchufarla inmediatamente y disimular…
Está prohibido cobrar en negro, pero todos lo hacen porque con el sueldo de 12 dólares no es posible sobrevivir. Está prohibido el dólar, pero todo el mundo opera con el billete verde porque consideran que el peso cubano es moneda de Monopoli.
En Cuba viven dos sociedades en el mismo espacio: los turistas que funcionan en dólares a precios occidentales y los cubanos que funcionan en pesos a precios soviéticos. Mismo bar, misma hamburguesa, distinta zona de la barra y distinto precio. Tal cual.
Luego están los sitios donde los cubanos no pueden entrar. Están en Cuba, pero son espacios reservados para los extranjeros. Hoteles y restaurantes tienen vetada la entrada a cubanos. No sólo por el precio sino por la ley. Humillante.

El disidente Oswaldo Payá me lo advirtió hace 10 años cenando a orillas del Malecón: “el modelo chino es un cuento chino”.

Entramos en un restaurante de esos. Regresamos a los años 60: mantelería de lino, cubertería de plata y servicio bien vestido. Diez camareros para un aforo de 50 personas. Comensales: cero. Nos trataron como reyes, comimos langosta a demanda y nos cobraron 20 dólares a los dos. ¿Eficiencia?
Por supuesto, todo esto es conocido por el régimen de los Castro. La solución fue la respiración artificial del petróleo venezolano. Pero eso ya se acabó. Así que la única manera de mantener el régimen es más represión. El Ejército asumió el control económico-empresarial. Es la nueva ‘casta’ que pretende perpetuarse con lo que Payá bautizó como el ‘cambio-fraude’.
El disidente Oswaldo Payá me lo advirtió hace 10 años cenando a orillas del Malecón: “el modelo chino es un cuento chino”.

El opositor al castrismo fallecido en extrañas circunstancias en 2012, Oswaldo Payá / EFE 
 
Ahora que Fidel ha pasado a mejor vida todo cambia. Hoy hay cerca de 500.000 ‘cuentapropistas’ que emplean a unos 2 millones de personas que ya no dependen del Estado.
La mentira se basaba en su persona. La gente habla en las calles. De todo menos de ‘Esteban’: este-bandido.
Ahora está por ver si el ‘cambio-fraude’ evoluciona hacia el modelo chino que pretende la oligarquía de Miami: apertura económica, libertad de inversiones, pero firmeza en el control político.
El disidente Oswaldo Payá ya me lo advirtió hace 10 años cenando en un precioso restaurante a orillas del Malecón: la apertura económica sin libertad política sería un fraude, “el modelo chino es un cuento chino”.



Soy economista de profesión y periodista de vocación. Como decía José Ignacio Rivero, director del Diario de la Marina, decano de la prensa de Cuba (otros tiempos), "el periodismo es en lo externo una profesión y en lo interno un sacerdocio". Colaboro en diversos medios y soy editor de campañas de CitizenGO.
 
 
 
http://www.actuall.com/criterio/democracia/la-cuba-conoci-periodista-clandestino/